Tamara Navarro
Lunes, 16, Septiembre, 2024
La Fiscalía de Alicante ha pedido este lunes 18 años y cinco meses de cárcel para un hombre que, considera probado, utilizaba su arma -a menudo montándola y descargándola- ante su mujer para humillarla, amenazarla y doblegar su voluntad de con el fin de agredirla sexualmente.
La acusación pública ha mantenido la solicitud inicial en el juicio ante un tribunal de la Sección Primera de la Audiencia de Alicante, dado que el encausado no ha admitido los hechos ocurridos durante 17 años, entre 2004 y 2021 en Cañada (Alicante).
La fiscal ha considerado probado ese trato vejatorio, las humillaciones, amenazas y el control acérrimo que ejercía sobre la víctima, que manifestaba con expresiones como "puta", "hija de puta", "no vales para nada", "dónde vas a ir sin mí" o con advertencias como "ya sabes lo que hay debajo de la cama", en alusión al arma de fuego que escondía bajo el colchón para las agresiones sexuales.
La víctima ha señalado que no había presentado denuncia antes de 2021 por temor a las consecuencias que podía acarrearle y que solo acudió a la Guardia Civil, aconsejada por su hija, al ver que el acusado no estaba dispuesto a iniciar el proceso de divorcio.
Su versión ha contado con el respaldo de su hija y con los audios aportados con grabaciones del trato vejatorio, que se intensificó entre 2019 y 2021.
La verosimilitud de las acusaciones también había quedado confirmada por los partes médicos que reflejan las agresiones, como la rotura de un dedo, y por los informes periciales psicológicos que se le practicaron.
Frente a la versión de la fiscalía, a la que se ha adherido la acusación de la víctima, la defensa del acusado ha solicitado la libre absolución al negar éste los hechos y sostener que poseía armas porque había sido cazador, que había dejado esa afición hace 15 años y que tenía las armas guardadas en su cajetín, algunas de ellas con un cierre provisto de código de seguridad, en un altillo. FUENTE: EFE