La Unidad de Dolor del Hospital Santa Bárbara de Soria ha cumplido su primer aniversario durante el mes de julio y es momento de hacer balance de este primer año de andadura como servicio certificado e incorporado a la cartera de servicios del hospital como especialidad independiente dentro del servicio de anestesia, publica EFE.
En esta fase de análisis se encuentran ahora los profesionales de esta unidad, quienes, tras un primer año de intenso trabajo con más de 800 consultas registradas, se han sentado a revisar lo que funciona y lo que se puede mejorar tanto a nivel económico y técnico como a nivel humano.
Así lo ha valorado el jefe de la Unidad de Dolor de Soria, José Miguel Lozano, en una entrevista a EFE, donde ha señalado que las conclusiones del balance son "muy positivas, tras unos primeros 12 meses de transición, la sensación es muy satisfactoria".
Lozano ha asegurado que las previsiones en cuanto al número de atenciones "se han quedado cortas" ya que, en la presentación de esta unidad hace un año, las cifras previstas de nuevos pacientes rondaban los 400 teniendo en cuenta que "un mismo paciente puede generar varias consultas dependiendo si hay que aplicar alguna técnica específica o programar algún quirófano", ha expresado el especialista, que augura que "esta tendencia irá en aumento".
El jefe de la Unidad de Dolor soriana ha confirmado que más del 60% de pacientes de esta unidad acuden por patologías lumbares, desde hernias discales a dolores de espalda, por lo que, desde la unidad, intentan mitigar el problema de las largas listas de espera, "realizando en la primera consulta un bloqueo diagnóstico al paciente para comprobar si el problema reside en la zona esperada", ha detallado Lozano.
En relación a los tratamientos que se llevan a cabo en esta Unidad de Dolor y, a excepción de los más especializados que se realizan en la unidad de referencia ubicada en Valladolid, Lozano ha explicado que en la mayor parte de los tratamientos que se realizan, "se utiliza la radiofrecuencia, el ozono o técnicas láser".
Aunque es complicado hablar de una desaparición total del dolor, Lozano ha destacado "el gran porcentaje de casos exitosos" que han tenido durante este primer año de funcionamiento, "con dolores curables al 100% y otros que requieren la repetición continua de diversas técnicas con un porcentaje de mitigación del dolor bastante alto".
Pese a ello, Lozano también ha destacado la existencia de dolores "difíciles o imposibles de tratar" como pueden ser los dolores derivados de la fibromialgia o dolores oncológicos para los que no existe un tratamiento y, desde la unidad, "no se puede ofrecer ningún avance o mejora", ha lamentado.
En este aspecto, Lozano ha resaltado la importancia de "comunicar y clarificar" cuál es el trabajo que se lleva a cabo en esta unidad de dolor, especialmente a los ciudadanos como a otros especialistas, ya que "no todo se va a solventar con la misma eficacia y hay que dar prioridad a pacientes cuya patología pueda ser tratada de manera exitosa y correcta".
Además de los nuevos pacientes que se han incorporado a esta unidad, Lozano ha explicado "el boom" al que han tenido que hacer frente, "asumiendo la derivación de pacientes de Soria que estaban siendo tratados en otras unidades de dolor como Valladolid y que, desde la puesta en marcha de esta unidad, han pedido su traslado a Soria".
Actualmente, en la Unidad de Dolor de Soria trabajan cuatro especialistas con dos consultas y dos salas de exploración y sin un quirófano asignado.
Por este motivo, el jefe de esta Unidad ha destacado la "necesidad" de aumentar los días de consulta y de quirófano así como un aumento de plantilla. "Nos falta una persona para poder ofrecer nuestros servicios al 100 %".
En relación a este aumento de plantilla, Lozano ha señalado que el principal problema reside en que los jóvenes no quieren quedarse a trabajar en Soria por lo que "es complicado cubrir esa plaza vacante que nos falta en el equipo".
Finalmente, con vistas al futuro, Lozano ha recalcado el proyecto de ejecución de las obras para la construcción de un nuevo quirófano propio para la unidad, "un elemento fundamental para descongestionar las listas de espera y no depender de quirófanos externos", ha concluido.
